Lo prometido es deuda, o casi. Falta un día para julio pero mi falta de actividades en un piso donde sólo quedamos yo y mis maletas me obligan a actualizar un poco este blog.
Después de idas y venidas a Mallorca no podía dejar de contar un rinconcito donde has de comer si el tiempo y un coche a mano te lo permiten. Todavía no puedo dejar de recordar la fabulosa comida que preparan en este pequeño restaurante donde el detalle corre a cargo de sus encargadas y demás familiares Pizá Cañellas. Y es que si algo diferencia un hogar habitado por mujeres de otro donde no las hay son los detalles, la delicadeza de la decoración, de los objetos que adornan las mesas, la preparación y presentación de los platos. Sus consecutivos títulos que le acreditan dentro de la Guía Michelín no hacen más que destacar su calidad.
Si hablamos de su gastronomía, se podría hablar de la tradicional cocina mallorquina de fuerte carácter casero. No dejes de pedir las croquetas de espinacas con rape y pambolis. Aquí el plato más básico compuesto de pan y aceite se adorna con todo tipo de complementos que despiertan todos los sentidos.
Bon profit
Pamboli de jamón y queso
Lugar: Carretera Manacor, km. 21 - Tel.971 66 51 09 - 07210 Algaida (Mallorca)
